34 AÑOS...

... son los que cumple hoy Javier, mi maridín.
Es su primer cumpleaños como papi, así que para él va a ser muy especial, aunque con curro recién estrenado y un fin de semana por delante cargado de eventos, será dificil que lo celebremos de manera especial.
No importa. La mejor celebración es saber que estamos los tres juntos y que si Dios, la Vida y el Destino lo permite, tenemos muchos años por delante para celebrarlo.
Llevamos juntos toda una vida (más de 16 años), y hoy quiero aprovechar este nuevo espacio, para decirle que lo quiero, que está siendo una suerte poder compartir con él media vida y que espero poder llegar a viejecitos juntos, y ver esos nietos negritos que el futuro nos tiene guardados.
Sin él, habría sido imposible llegar a Míheret. Su ilusión en el proceso, su coherencia en las decisiones, su ánimo en lo momentos duros (al final los hubo, y muchos), su paciencia conmigo, su amor incondicional a nuestra hija desde el día de la asignación... es lo que ha permitido que hoy seamos una FAMILIA.
GRACIAS JAVI.
PD. Esta sensiblería la hace el ser madre, antes... ¡ni de coña!!

¡TIENE MAMITIS!

Tengo que decirlo: ¡Me encanta!
Me hago la dura cuando llora si no me ve, cuando vuelvo de trabajar y ya no me deja ni a sol ni a sombra, cuando llega alguien nuevo y me señala con el dedo y dice "mamá"...; pero he de reconocer que me vuelve loca.
Cuando llegamos con ella la gente se maravillaba de lo simpática que era porque se iba con todo el mundo, y yo aguantaba el tirón; pero en el fondo estaba deseando que llegara el día que me reconociese como madre, como la persona que más la quería en el mundo (con el permiso del papá), como los brazos que nunca la iban a dejar caer, como la sombra que siempre la acompañaría en su vida...
Poco a poco el día va llegando y es entonces cuando te das cuenta de que el proceso de adopción no termina cuando abrazas por primera vez a tu hija, sino que realmente ese primer abrazo es el comienzo de la "Gran aventura".
Hoy nueve meses después de achucharla por primera vez puedo decir orgullosa que nuestra hija tiene mamitis (y también papitis). Aunque no es una nena "ñoña" y le gusta estar con la familia cercana, cuando algo no le "cuadra" (lugares nuevos, gente desconocida, si se hace daño...) nos busca a su padre y a mí.
Es en esos momentos cuando te das cuenta que ella poquito a poco también nos está adoptando.

HOY COMIENZO ESTE BLOG

La verdad es que no se muy bien como va a ir saliendo, ni siquiera si sabré hacerlo; si podré tenerlo actualizado, si tendré imaginación para que esté bonito...; pero después de llevar unos meses "enganchada" a las historias de los demás, me he animado a escribir mi-nuestra historia.
Quizá sea un poco tarde, porque lo ideal habría sido comenzar este blog al comienzo de nuestra andadura en la adopción, pero en aquel entonces no estaba metida en este mundillo cibernético, pero bueno, "como nunca es tarde, si la dicha es buena" hoy comienzo con él.
Espero que me sirva también para poner en orden nuestra historia, y desenterrar todos esos sentimiento tan maravillosos que ha provocado nuestro proceso.
¿Quién sabe? A lo mejor en el futuro también sirva a mi hija para construir su historia tal y como la vivimos ahora y no solo cómo la recordaremos dentro de unos años.
En fin, con esto termino por hoy, y espero poder poquito a poco ir contando la historia pasado, la historia presente e ir caminando hacia la historia futura.
¡Cuento con vosotros!