Hoy se celebra el DÍA DE ÁFRICA.
La verdad es que tengo que admitir, con gran tristeza, que se muy poco de África. Ni siquiera se decir por qué hoy se celebra el día (en cuanto me ponga al día con los blogs, sabré un poquito más gracias a vosotros/as).
Pero hay algo que sí puedo asegurar: Tengo un trozo de África en mi casa, en mi cabeza, en mi corazón y en mi alma.
Lo que más quiero en el mundo ha venido de África y por lo tanto estaré eternamente en deuda con este continente en general y con Etiopía en particular.
Mi primer vínculo con África lo tuve a través de un amigo salesiano, que es misionero en África. El hablaba de aquello con admiración, para él su paso por Parla, era tan solo un paréntesis para volver a su amado "hogar". Hoy, unos cuántos años después, continua por allí. Gracias a él tenemos en el pasillo un tapiz africano que parecía predecir lo que vendría unos añitos mas tarde. En las entrevistas del CI, salió esta etapa de nuestra vida como una etapa decisiva para nuestra decisión de adoptar en África.
Siempre lo tuvimos claro, el sur era nuestro destino.
África es como un canto de sirena, no puedes oponer resistencia a su llamada; y una vez que la conoces caes rendido a sus pies.
Solo hemos viajado allí para recoger a nuestra hija, pero nos enamoramos con los cinco sentidos.
Sabemos que nuestro pasado, nuestro presente y por supuesto nuestro futuro está ligado a África, solo el tiempo y el destino nos dirán de que manera.
Desde África por vocación
Hace 2 meses